Siempre me ha gustado mucho experimentar en la cocina.
Cuándo tengo un rato de tiempo libre, me gusta trastear con alimentos fermentados, probar nuevas recetas.
Desde hace algún tiempo estoy cocinando con alimentos probióticos funcionales que aportan un valor añadido a mi dieta y a la de mi familia.
¿Qué alimentos son ricos en probióticos?
No creo que te descubra nada nuevo.
Habrás visto muchísimas listas con los beneficios de los alimentos que contienen más probióticos naturales.
La mayoría son productos fermentados que te ayudan a mejorar la digestión y a fortalecer tu sistema inmunológico.
El listado de alimentos con alto nivel de probióticos incluye al yogur, al kimchi, al chucrut, al kéfir de leche y de agua, a la kombucha, al miso, al tempeh, al natto y al chocolate negro.
No me olvido del descubrimiento del «último superalimento»: las microalgas, en especial la espirulina. Son la gran sensación, el nutriente estrella que todas las famosas incluyen en su dieta.
Esa dieta con la que dicen que pueden comer de todo y con sólo dormir ocho horas y beber mucha agua, logran lucir esos tipazos.
Tú y yo sabemos que una madre trabajadora necesita mucho más que «dietas» milagrosas de Instagram. Necesitamos llevar una vida sana, una rutina alimentaria saludable que nos permita superar el día a día.
Es evidente que para lograr ese objetivo vital necesito ayuda en forma de suplementos probióticos.
Mi experiencia personal al comprar probióticos naturales online y tomarlos de forma regular ha sido totalmente satisfactoria.
De hecho, cada vez tengo más claro para qué sirven los probióticos.
¿Dónde comprar alimentos funcionales?
Prefiero los complementos probióticos pero eso no quita que me guste tener controlado esta comparativa con los alimentos con más carga probiótica.
Échale un vistazo y seguro que encuentras algunos consejos y recetas para elaborar quesos veganos y yogures veganos a partir de probióticos naturales.
Yogur
El yogurt es el alimento probiótico más común.
Eso sí, no sirve cualquier yogur. Sólo será probiótico si está vivo, es decir, si no está pasteurizado.
Por lo tanto, una mujer embarazada no puede tomarlo, necesitará aportar prebióticos naturales a su dieta mediante alguno de estos mejores suplementos para el embarazo.
También puedes crear tu propio yogurt vegano a partir de cepas probióticas. Se trata de una receta casera en la que fermentas probióticos para tener tu yogur.
Probióticos para hacer yogur
Kéfir
El kéfir es un alimento probiótico muy parecido al yogurt aunque tiene muchos más nutrientes y proteínas. Se trata de un fermentado de la leche que se elabora añadiendo granos de kéfir.
Si eres vegano y quieres sustituir la leche puedes hacerlo con el kéfir elaborado con agua. Si prefieres suplementar tu dieta vegetariana con probióticos naturales de amplio espectro puedes hacerlo siguiendo los consejos de esta comparativa con los mejores productos probióticos para veganos.
Otra opción puede ser que intentes hacer tu propio queso vegano casero fermentado con probióticos. Se trata de una alternativa saludable y más barata donde puedes crear recetas de quesos de anacardos, de almendras, de nueces…
Probióticos para hacer queso
También te recomiendo que consultes en nuestra sección de bebidas probióticas cómo hacer rejuvelac para luego poder cocinar con él las mejores recetas de queso casero.
Kimchi
El kimchi es un alimento vegetal fermentado muy típico de Corea que se elabora a partir de col china. Es un plato muy antiguo que incluye lactobacillus, una de las cepas probióticas más comunes.
En nuestra casa lo solíamos comprar hecho, en un bote de 400 gramos, de la marca Wang pero desde que descubrí esta pasta de pimiento picante hacemos kimchi casero siempre que podemos.
Seguimos esta receta pero cambiando el chile por la pasta de pimiento picante
Como habrás visto, hacer kimchi coreano en casa es fácil. Mi marido insiste mucho en que nos compremos un tarro de fermentación con el que elaborar encurtidos, kombucha y demás verduras pero a mi me cuesta imaginar donde lo vamos a guardar con el espacio tan pequeño que tenemos en la cocina.
Además, a mi ya me sirve de sobra con tener el famoso libro de Lauryn Chun con 60 recetas tradicionales y modernas para cocinar kimchi.
Chucrut
El chucrut es muy parecido al kimchi. Es un plato típico de Alemania y a diferencia del kimchi es menos picante. No tiene todos los nutrientes naturales que puede tener el kimchi con su pimiento y su ajo pero el chucrut sigue conservando toda su riqueza en vitaminas A, B, C y E.
En nuestra casa nos gusta menos pero alguna vez lo hemos usado para acompañar alguna carne o incluso como complemento para una sopa calentita.
Miso
Si sigues alguna dieta macrobiótica, seguro que el miso forma parte de tu día a día. Es un ingrediente principal de la cocina japonesa. Los japoneses atribuyen al miso propiedades medicinales.
El miso se elabora a partir de la fermentación del koji con habas de soja. El koji o aspergillus oryzae es un hongo sobre el que se sustenta gran parte de la gastronomía de Japón.
La forma más común de consumir el miso es en sopas aunque también puedes añadirlo a salsas para darles más sabor. El principal consejo para cocinar miso es evitar que hierva para que las ventajas probióticas no se pierdan con la pasteurización.
Puedes conseguir una decente sopa de miso en sobres en la sección de alimentos probióticos del Mercadona o puedes probar a comprar esta delicatessen de miso ecológico de arroz, sin pasteurizar para mantener sus beneficios como probiótico natural.
Microalgas
La última revolución de la alimentación. El superalimento que sale del mar.
Las algas y sus propiedades nutricionales con nutrientes esenciales de fácil asimilación por el intestino.
Las microalgas están repletas de bifidobacterias y lactobacilos, los dos probióticos naturales más comunes y que más contribuyen a una mejora de la flora intestinal. Además tienen vitamina A, B1, B2, C, D, E, fósforo, potasio, calcio, hierro, yodo, fibra y sodio.
Puedes encontrar muchos tipos de algas comestibles: espirulina, alga nori, wakame, agar-agar, kombu… Son vegetales del mar muy típicos de la cocina japonesa pero que ya se han exportado a todo el mundo.
Natto
Hay un dicho milenario que dice que si te gusta el sabor del natto, puedes considerarte mitad japonés.
El natto es un alimento típico de Japón que procede de la soja fermentada, como el miso y el tempeh. Es un ingrediente muy nutritivo y de fácil absorción con todas las propiedades probióticas de la soja sin los compuestos tóxicos y alérgenos (se pierden al fermentar la soja).
Los beneficios del natto vienen provocados por la bacteria probiótica Bacillus Subtilus, la llamada «bacteria de la longevidad» ya que según afirman el natto alarga la vida y frena el envejecimiento. Y si a eso le sumas la enzima nattokinase que ayuda a prevenir el cáncer te sale uno de los alimentos probióticos funcionales de máxima calidad.
Si quieres saber dónde comprar natto en España, lo vas a tener difícil. Tendrás que buscar tiendas de comida japonesa especializada para que te lo traigan de importación. Mi consejo y recomendación es que pruebes a comprar este bote con 180 cápsulas de alta pureza de nattokinase o este complejo vitamínico único no sintético creado a partir de natto fermentado.
Tempeh
El tempeh, al igual que el natto, es un producto creado a partir de la fermentación de la soja. Es un ingrediente típico de Indonesia muy rico en proteínas vegetales, calcio, isoflavonas y grasas buenas y bajo en sodio.
La diferencia entre el tempeh y el natto son los hongos que se utilizan con la soja fermentada. Se obtienen así enzimas diferentes que en el caso de tempeh se asemejan a antibióticos naturales capaces de frenar procesos infecciosos intestinales.
Es complicado conseguir tempeh fuera de Indonesia, China, Japón y alrededores.
Creo que no puedes comprar tempeh en el Mercadona o en el Lidl.
Así que si quieres probar a cambiar el tofu de tu dieta vegetariana por un sabor mucho más rico como el que tiene el tempeh, mi opinión es que compres este bote de cristal de tempeh bio típico oriental o que pruebes con esta receta casera de cómo hacer tempeh a partir de garbanzos.
Chocolate negro
Me guardo lo mejor para el final.
¡El chocolate negro tiene propiedades y beneficios de los probióticos naturales!
Todos los tipos de chocolates contienen probióticos de forma natural ya que proceden de la fermentación del cacao.
El chocolate negro es el que más ventajas tiene. Es rico en antioxidantes para combatir el envejecimiento y además algunos estudios afirman que el chocolate puede tener propiedades antiinflamatorias.
Ya no tengo que ponerme ninguna excusa cuando me termino del tirón una tableta de chocolate 99% puro de Simn Coll, ¡mi preferido!
Ventajas de comprar probióticos naturales
Uno de los beneficios de todos los probióticos y prebióticos que encontrarás en www.probioticosnaturales.com es que no necesitan refrigeración.
Son productos científicamente probados que han superado los controles de seguridad alimentaria y médica más exhaustivos de la Unión Europea y que cuentan con el aval de poder comprarlos en Amazon a un mejor precio y con gastos de envío gratis en la mayoría de las ocasiones.
Es mucho más complicado elaborar un yogur fermentado, sin control matemático de los probióticos, sin saber si tu encimera está lo suficientemente limpia como para evitar la contaminación cruzada y sin manejar los tiempos exactos de enfriamiento, pasteurización y almacenamiento.
No te niego que es muy divertido intentar fermentar kombucha casera, es un experimento genial para hacerlo con tus hijos, un buen plan para días de lluvia pero si quiero llevar una microbiota intestinal sana prefiero tomar suplementos seguros de probióticos naturales de forma constante.
Tienes un ejemplo excelente con el famoso complejo alimenticio Prodefen Plus en sobres, que incluye siete cepas probióticas y prebióticas. Ideal para fortalecer el tracto digestivo.
Uno de los probióticos naturales más recomendado en herbolarios.
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